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Llevar tu bolso: Cargar el bolso de una doncella
no es algo que un caballero haga por gusto. Él lo harán sin inconveniente
alguno cuando están completamente enamorados. Ya sea para ser gentil o ayudarte
a no cargar de más o porque es mucho peso para ti al estar muy ocupada, tú
pareja no dudará en cargar tu bolsa aunque termine viéndose afeminado.
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Comprar toallas sanitarias: No hay hombre
que disfrute ir a un comercio o farmacia a comprar toallas sanitarias. El
pasillo de higiene femenina no es un lugar que frecuentaría por gusto, pero lo
hará si te quiere y sabe que lo necesitas.
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Protegerte: Un hombre no protegerá o defenderá
a una mujer que no quiere. La mayoría de ellos prefiere evitar el tema, así que
no desencadena un conflicto sólo por una mujer que no les gusta o aman. Sin
embargo, si siente que eres especial para él, no lo pensará ni un segundo y te
defenderá de malas acciones o malos tratos. No sólo te protegerá, sino que
estará dispuesto a defenderte de lo que sea.
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No ver un partido por estar contigo: Para un
hombre que ame el deporte dejar de ver un partido es algo serio y aún más si va
a jugar su equipo favorito. Pero si ese partido choca con una cita… sabrás si te
quiere o no dependiendo de su decisión. ¿Qué es más importante para él? ¿El fútbol o tener un momento bello contigo? Si la elegida eres tú, no dudes de su amor.
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Atenderte cuando estés enferma: Te prepara
caldo de pollo cuando estás enferma de la gripe y agua de limón, te consiente,
se preocupa. Créeme, un hombre que no te quiere no hará ni el menor intento de
visitarte si estas agripada en cama. Porque, no solo tendría “quizás” que
atenderte, se estaría exponiendo a enfermarse él.
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Acompañarte en los momentos difíciles: Un chico que
te amé estará ahí en los momentos difíciles. Pudiera ser en una operación, en un
velatorio o incluso después de un mal día de trabajo. Si te ama, se preocupará por
ti y te apoyará en los momentos rudos, ya sea para alentarte o que no te sientas sola, te consolará y secará
tus lágrimas si fuera necesario.
